Bien, liberarse de todo eso es liberarse del pasado; es el estado de una mente que dice, “no sé,” y que a la vez no busca una respuesta. Una mente así no busca nada en absoluto, no espera nada; y solo en ese estado, uno puede decir, “comprendo”. Es el único estado en el que la mente es libre, y desde ese estado uno puede ver lo conocido, pero no al revés. Desde lo conocido, no se puede ver lo desconocido; pero cuando uno comprende ese estado de libertad de la mente, esa mente que dice, “no sé” y permanece con ese no saber y es por tanto, es inocente, desde ese estado uno puede funcionar, puede ser un ciudadano, estar casado, o lo que quiera. Entonces, lo que uno hace es relevante, tiene un significado en la vida. Pero nos mantenemos en el campo de lo conocido, con todos sus conflictos, luchas, disputas, agonías, y desde ese campo intentamos encontrar lo desconocido, por lo tanto no buscamos realmente libertad. Lo que queremos es la continuación, la extensión de la misma vieja cosa: lo conocido.
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jueves, 18 de diciembre de 2014
Liberarse del pasado-J.Krishnamurti
lunes, 15 de diciembre de 2014
El Roble
Era un lugar de rara belleza, aislado, tranquilo, y la gente aún no lo había estropeado. Es extraño cómo los seres humanos profanan la naturaleza con sus matanzas, su ruido y su vulgaridad. Pero aquí, con las secoyas y el roble y todas las flores primaverales, esto era realmente un santuario para la mente quieta, para una mente estable y firme como esos árboles ‑no debido a alguna creencia, algún dogma, ni por la dedicación a algún propósito; la mente libre no necesita de estas cosas-. Uno miraba los árboles, tan extraordinariamente quietos en esa tarde. El camino se hallaba muy lejos y no podía oírse el ruido de los vehículos; de la casa cercana no llegaba sonido alguno y el silencio era total. Aun la brisa se había detenido y no se agitaba ni una sola hoja. El nuevo pasto de primavera era de un verde delicado, uno apenas se atrevía a tocarlo. La tierra, los árboles y el faisán que lo vigilaba a uno, eran indivisibles. Todo formaba parte de ese extraordinario movimiento de la vida y el vivir, cuya profundidad el pensamiento jamás podrá alcanzar. El intelecto puede tejer un montón de teorías, puede construir alrededor de ello una estructura filosófica, pero la descripción no es lo descrito. Si usted se sentara quietamente, muy lejos de todo el pasado, entonces quizá podría sentir esto; no usted sintiéndolo como un ser humano separado, sino más bien porque la mente se hallaría tan completamente silenciosa que habría una inmensa percepción alerta sin la división del observador.
Y si paseando se alejara a poca distancia, encontraría una granja con enormes cerdos, montañas de carne rosada, resoplante, lista para el mercado. (Ellos dijeron que era un negocio muy bueno y lucrativo). Usted vería a menudo un camión subiendo por un sendero áspero y sinuoso de la granja, y al día siguiente habría menos cerdos. (“Pero necesitamos vivir”, dijeron ellos...). Y la belleza de la tierra ha sido olvidada.
Del Boletín 8 (KF), 1970
domingo, 7 de diciembre de 2014
el peso de las creencias- anonimo
Dos jóvenes monjes fueron enviados a visitar un monasterio cercano.
Ambos vivían en su propio monasterio desde niños y nunca habían salido
de él. Su mentor espiritual no cesaba de hacerles advertencias sobre los
peligros del mundo exterior y lo cautos que debían ser durante el
camino.
Especialmente incidía en lo peligrosas que eran las mujeres para unos monjes sin experiencia:
-Si veis una mujer, apartáos rápidamente de ella. Todas son una tentación muy grande. No debéis acercaros a ellas, ni mucho menos hablar, por descontado, por nada del mundo se os ocurra tocarlas. Ambos jóvenes aseguraron obedecer las advertencias recibidas, y con la excitación que supone una experiencia nueva se pusieron en marcha. Pero a las pocas horas, ya punto de vadear un río, escucharon una voz de mujer que se quejaba lastimosamente detrás de unos arbustos. Uno de ellos hizo ademán de acercarse.
Especialmente incidía en lo peligrosas que eran las mujeres para unos monjes sin experiencia:
-Si veis una mujer, apartáos rápidamente de ella. Todas son una tentación muy grande. No debéis acercaros a ellas, ni mucho menos hablar, por descontado, por nada del mundo se os ocurra tocarlas. Ambos jóvenes aseguraron obedecer las advertencias recibidas, y con la excitación que supone una experiencia nueva se pusieron en marcha. Pero a las pocas horas, ya punto de vadear un río, escucharon una voz de mujer que se quejaba lastimosamente detrás de unos arbustos. Uno de ellos hizo ademán de acercarse.
-Ni se te ocurra -le atajó el otro-. ¿No te acuerdas de lo que nos dijo nuestro mentor?
-Sí, me acuerdo; pero voy a ver si esa persona necesita ayuda -contestó su compañero,
Dicho esto, se dirigió hacia donde provenían los quejidos y vio a una mujer herida y desnuda.
-Por favor, socorredme, unos bandidos me han asaltado, robándome incluso las ropas. Yo sola no tengo fuerzas para cruzar el río y llegar hasta donde vive mi f:lmilia.
El muchacho, ante el estupor de su compañero, cogió a la mujer herida en brazos y, cruzando la corriente, la llevó hasta su casa situada cerca de la orilla. Allí, los familiares atendieron a la asaltada y mostraron el mayor agradecimiento al monje, que poco después reemprendió el camino regresando junto a su compañero.
-¡Dios mío! No sólo has visto a esa mujer desnuda, sino que además la has tomado en brazos.
-Así era recriminado una y otra vez por su acompañante. Pasaron las horas, y el otro no dejaba de recordarle lo sucedido.
-Has cogido a una mujer desnuda en brazos! ¡Has cogido a una mujer desnuda en brazos! ¡Vas a cargar con un gran pecado!
El joven monje se paró delante de su compañero y le dijo:
-Yo solté a la mujer al cruzar el río, pero tú todavía la llevas encima.
-Sí, me acuerdo; pero voy a ver si esa persona necesita ayuda -contestó su compañero,
Dicho esto, se dirigió hacia donde provenían los quejidos y vio a una mujer herida y desnuda.
-Por favor, socorredme, unos bandidos me han asaltado, robándome incluso las ropas. Yo sola no tengo fuerzas para cruzar el río y llegar hasta donde vive mi f:lmilia.
El muchacho, ante el estupor de su compañero, cogió a la mujer herida en brazos y, cruzando la corriente, la llevó hasta su casa situada cerca de la orilla. Allí, los familiares atendieron a la asaltada y mostraron el mayor agradecimiento al monje, que poco después reemprendió el camino regresando junto a su compañero.
-¡Dios mío! No sólo has visto a esa mujer desnuda, sino que además la has tomado en brazos.
-Así era recriminado una y otra vez por su acompañante. Pasaron las horas, y el otro no dejaba de recordarle lo sucedido.
-Has cogido a una mujer desnuda en brazos! ¡Has cogido a una mujer desnuda en brazos! ¡Vas a cargar con un gran pecado!
El joven monje se paró delante de su compañero y le dijo:
-Yo solté a la mujer al cruzar el río, pero tú todavía la llevas encima.
miércoles, 3 de diciembre de 2014
LA SERENIDAD DE LA MENTE
¿No es necesario, si queremos comprender algo, que la mente esté serena?
Si tenemos un problema, él nos preocupa, ¿no es así? Lo ahondamos, lo
analizamos, lo desmenuzamos, en la esperanza de comprenderlo. ¿Pero es
posible comprender por medio del esfuerzo, del análisis, de la
comparación, por medio de la lucha mental en cualquiera de sus formas?
La comprensión, por cierto, sólo llega cuando la mente está muy quieta.
Decimos que, cuanto más luchemos con el problema del hambre, de la
guerra, o con cualquier otro problema humano, cuanto más entremos en
conflicto con él, más lo comprenderemos. ¿Pero es eso verdad? Las
guerras, el conflicto entre individuos y sociedades, han continuado a
través de los siglos. La guerra interna o externa está siempre presente.
¿Hallamos solución a esa guerra, a ese conflicto, con más conflicto,
con más lucha, con un sagaz esfuerzo? ¿O entendemos el problema tan sólo
cuando nos hallamos directamente frente a él, cuando nos encaramos con
el hecho? Y sólo podemos encararnos con el hecho cuando no se interpone
agitación alguna entre la mente y el hecho. ¿No es, pues, importante, si
es que hemos de comprender, que la mente esté quieta?J. Krishnamurti
jueves, 2 de octubre de 2014
LOS MIEDOS
¿Qué es el miedo? Según el diccionario: Sensación de
angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario.
Y de acuerdo a las experiencias de vida, el miedo es el
principal obstáculo para alcanzar la felicidad.
El ejemplo mas claro de la presencia del miedo en nuestras vidas es la manera en que sostenemos
nuestra zona de confort sin arriesgarnos en nada (por miedo) y permanecer
vegetando en ella todo el tiempo. Y la vida esta allí, esperándonos, quizás por
fuera de nuestra zona de confort!! Es lo mismo que poseer una gran casa,
enorme, y ocupar solo una habitación, desperdiciando el resto. La felicidad
esta al alcance de nuestra mano, solo hay que tomarla, claro, sin miedos.
Generalmente, las personas proyectamos, a través del pensamiento,
nuestras ideas. Las mismas se convierten en realidad, se cristalizan en hechos
concretos. Las proyecciones, las creencias sostenidas transforman y crean
posibilidades u obstáculos. Es decir, si proyectamos felicidad, esa felicidad
se convierte en algo tangible.
De igual manera, si proyectamos, imaginamos y creemos negativamente, si pensamos que estamos en
riesgo, esa ilusión se concretará, se hará realidad.
Hay diversas formas de combatir el miedo, pero la más
segura, es la confianza.
Confianza y desapego, las cosas, las personas, todo cumple
su función en un momento determinado y ya esta, luego hay que soltar y
despegarse.
La meditación es un medio eficaz para superar los miedos,
solo hay que practicarla de manera sostenida y poco a poco, se disiparán todos
los obstáculos y la felicidad se alcanzará. Hari Om.
sábado, 16 de agosto de 2014
impulsate hacia tus objetivos
Como hacer que tu vida sea potencia pura?
Pues existe el camino y este camino incluye no solo lo espiritual sino también lo material que se concretara a través de tus objetivos claros y precisos. Estos pequeños pasos servirán como tu guía para ayudarte en ese proceso, y podrás percibir al leerlos que son acciones que probablemente tomas en tu vida de manera cotidiana,pero sin pensarlo, es decir de manera intuitiva. Esta guía quizás sirva para hacerte más consciente en tus elecciones. Estos objetivos deben constituir tu intención, si has leído este blog hay dos apartados dedicados a la INTENCIÓN. La intención dará a tus objetivos el poder de cambiar y transformar.
Vamos a dedicar otra entrada de este blog, la próxima para comprender cuando una decision es la correcta y cuando las intenciones son lo que deben ser.
Otro aspecto a tener en cuenta es la ATENCIÓN que pones en las cosas que haces. ¿Porque? Pues porque la atención le dará impulso y energía a esas cosas. Hay también en este blog entradas dedicadas a la ATENCIÓN.
Y ya tenemos dos Ítems en nuestra guía
ATENCIÓN
INTENCIÓN
como ves, la relación es crucial para lograr ese impulso en tu vida, el que necesitas y no más del que necesitas. ¿Porqué no más del que necesitas? Pues eso lo dejamos para la próxima entrada. Gracias por el apoyo y las lecturas.
Pues existe el camino y este camino incluye no solo lo espiritual sino también lo material que se concretara a través de tus objetivos claros y precisos. Estos pequeños pasos servirán como tu guía para ayudarte en ese proceso, y podrás percibir al leerlos que son acciones que probablemente tomas en tu vida de manera cotidiana,pero sin pensarlo, es decir de manera intuitiva. Esta guía quizás sirva para hacerte más consciente en tus elecciones. Estos objetivos deben constituir tu intención, si has leído este blog hay dos apartados dedicados a la INTENCIÓN. La intención dará a tus objetivos el poder de cambiar y transformar.
Vamos a dedicar otra entrada de este blog, la próxima para comprender cuando una decision es la correcta y cuando las intenciones son lo que deben ser.
Otro aspecto a tener en cuenta es la ATENCIÓN que pones en las cosas que haces. ¿Porque? Pues porque la atención le dará impulso y energía a esas cosas. Hay también en este blog entradas dedicadas a la ATENCIÓN.
Y ya tenemos dos Ítems en nuestra guía
ATENCIÓN
INTENCIÓN
como ves, la relación es crucial para lograr ese impulso en tu vida, el que necesitas y no más del que necesitas. ¿Porqué no más del que necesitas? Pues eso lo dejamos para la próxima entrada. Gracias por el apoyo y las lecturas.
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