¡POTENCIA TU VIDA!

Busca un lugar silencioso, donde no puedas ser interrumpido por unos momentos.
Siéntate de manera cómoda, que tu cuerpo esté relajado y en una postura que puedas mantener.
Si lo deseas, escucha música suave, instrumental.
Cierra tus ojos y comienza a respirar prestando especial atención a tu propia respiración. Respira libremente. Coloca toda tu atención en la inhalación y a la exhalación. Si te ves interrumpido por pensamientos que aparecen de repente, no pierdas energía en querer sofocarlos, deja que pasen, como las nubes que tapan momentáneamente el sol, y retoma la conciencia respiratoria.

Al cabo de unos minutos, advertirás que tu respiración se hace más profunda, es decir que tanto la inhalación como la exhalación son más prolongadas. Este es el momento en que la mente comienza a estar en calma. Prueba a realizar este ejercicio en algún momento del día, por unos pocos minutos.Comprobarás los beneficios de esta práctica.
Algunos tips que te pueden ayudar:
Decidir de antemano el tiempo que quieras estar en calma, las primeras veces conviene poco tiempo, algunos minutos, para luego ir aumentando.
No llevar encima teléfonos móviles, en todo caso desconectarlos o silenciarlos durante el tiempo de la meditación. Hacer lo mismo con los teléfonos fijos.
Avisar a los miembros de la familia que deseas estar en silencio  unos pocos minutos.Invitarlos.
Utilizar música suave,  algún aroma, la luz debe ser tenue.
Potencia tu vida ¡MEDITA y RESPIRA!

¿VALOR O PRECIO?

Podemos decir que el precio de un producto es la cantidad de dinero que pagamos por él, mientras que el valor es el beneficio o la utilidad que obtenemos si adquirimos el producto.
De esto podemos inferir que el valor de algo cambia de acuerdo a la sociedad, que en definitiva será la que fije cuando un bien es valioso y cuando no es valioso. La cultura determina entonces el valor de un bien, 
y es aquí donde comienza la confusión para el ser humano.
¿Cuando algo es valioso? Cuando no? Nuestro entorno esta invadido por el consumismo, los medios masivos, y son estos parámetros, en muchas ocasiones, los que determinan el valor de un bien. Pero ese valor determinado por esos parámetros es absolutamente ficticio, fútil y para nada edificante. Y pasa lo siguiente:Confundimos valor con precio.
Porque pensamos que si es mas costoso es mas valioso.
Y ese pensamiento, lo trasladamos a las personas, "tanto tienes, tanto vales"
Olvidamos que estamos a bordo de un sólo transporte: el planeta. Y olvidamos que formamos parte de una sola raza: La humanidad. 

SI dejamos que nuestra mente tome las riendas de nuestra vida, contaminada como está (la mente) de todo lo que ve, escucha y consume, estamos perdidos. Las prácticas de meditación contribuyen a que encontremos el equilibrio entre nosotros y el afuera. Están comprobados los efectos benéficos de la práctica meditativa en la vida de los sujetos, no sólo en aquellos aspectos espirituales, sino también en aspectos físicos y corporales: es que la mente, tranquila, no acosará al cuerpo con sus mensajes, recibidos a la vez del medio ambiente :"¡compra ésto, compra aquello!" . Una mente en calma ayudará a que tomemos mejores decisiones y tengamos una vida mejor, extendiendo este concepto a los que nos rodean, beneficiándonos todos con esta  práctica milenaria. Hasta  la próxima entrada, gracias por el apoyo y las lecturas.